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La lucha por el poder en Sudán no da tregua a su población

  • Foto del escritor: Jerónimo Leal González
    Jerónimo Leal González
  • 25 may 2023
  • 2 Min. de lectura

La guerra continúa en Sudán. En realidad, nunca dejó de existir hostilidad en un país cuyo gobierno se cogía con pinzas hasta que finalmente se derrumbó el pasado mes de abril. En teoría el conflicto está en un alto el fuego, pendiente de negociar un acuerdo de cese de hostilidades en Arabia Saudita. La realidad es que los combates continúan sucediendo y los muertos se siguen amontonando.

Los mayores perjudicados en este conflicto (y en todos) es la población civil, que a la pobreza endémica del país ahora le suman la inseguridad y la guerra. La OMS ya ha enviado ayuda humanitaria, junto con Emiratos Árabes Unidos. Según la Agencia EFE, se habrían enviado unas 30 toneladas de material médico urgente en el primer envío. Este reparto se queda pequeño, pues según las estimaciones de la propia OMS, más de 165.000 personas necesitan ayuda humanitaria de forma desesperada.

Mahamat Ramadane / Reuters

Sudán se encuentra en constante inestabilidad desde que, en 2019, un levantamiento popular derrocó al gobierno del dictador Omar al Bashir con ayuda del Ejército Sudanés y las Fuerzas de Apoyo Rápido (FAR). En esta ocasión, ambos grupos militares trabajaron codo a codo para el golpe de estado y prometieron unas elecciones democráticas para finales de 2023. En teoría, este sería el inicio del fin de la guerra para Sudán, cuya población ansiaba un gobierno estable y un país seguro. La realidad es que este fue el detonante del conflicto actual.

La causa de las hostilidades actuales fue que el Ejército Sudanés trató de absorber a las FAR. De esta forma, el Ejército pretendía acabar con posibles futuras rivalidades con el grupo paramilitar. Esto último propició el rechazo del grupo paramilitar y, tras semanas de tensiones entre ambos grupos, el 15 de abril comenzaron los combates.

Mientras tanto, la población se encuentra totalmente desesperada y, si la guerra civil continua, la crisis humanitaria será inevitable.

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